DOMINGO XIV TIEMPO ORDINARIO B

 

“Te basta mi gracia; la fuerza se realiza en la debilidad”

                                                                                                                                  Lima 07/07/2024

 


En los dos últimos domingos hemos visto varias figuras de fe, unos que tienen fe, como son los discípulos, y otros que sí creen, como Jairo y la hemorroisa, pero hoy nos presenta el seno familiar de Jesús, que no ha creído como el Mesías, como el Salvador.

 Este domingo, el Señor con su palabra, nos vuelve a mostrar su deseo de salvarnos.  Para eso se vale de otros hombres, para mostrarnos el camino de su amor y su salvación, y Dios se sorprende por la falta de fe y confianza que tenemos los hombres hacia Él.

            En la primera lectura vemos que el Señor va enviando profetas con la única intención de salvarnos, pero se da cuenta que el pueblo es de dura cerviz, que no obedecen la presencia de los profetas, y el Señor insiste a los profetas que se animen, se motiven, que se esfuercen en anunciar la salvación de Dios, y que cada profeta cuenta con la fuerza del Espíritu y la presencia de Dios, porque el único protagonista de todo esto es el mismo Dios.  Dios nos ha creado libres y depende de cada uno de nosotros si acogemos o no su palabra, para que nos sirva de salvación.


            En la segunda lectura, vemos que san Pablo a través de su debilidad y fragilidad por un pecado que no lo deja avanzar, no lo deja caminar en libertad, le pide al Señor que le quite ese pecado, esa preocupación, y Dios le dice: “Te basta mi gracia” y san Pablo por eso se gloría y le da gracias a Dios, porque en medio de su debilidad el Señor busca salvarlo.  El Señor busca salvarnos, por nuestra fragilidad humana; así nos sorprende Dios también, cuando Él quiere y desea salvarnos, es capaz de salvarnos hasta por el pecado, y por medio de este pecado que podemos tener, y siempre nos confesamos del mismo pecado, a lo mejor por ahí Dios se está metiendo para salvarnos.

            Además, Dios nos enseña que, por medio de nuestra debilidad, nos hace darnos cuenta que siempre dependemos de Él para salvarnos, basta que tengamos fe en Él.

       


Y en el evangelio vemos a Jesús que se sorprende por la falta de fe de sus paisanos, y por otro lado sus paisanos se sorprenden por la manera de actuar de Jesús.  Y la única manera de actuar de Jesús es transmitiéndonos su amor, su misericordia, su cercanía de parte de Dios, solo para eso, para salvarnos.  Pero se sorprende porque en su tierra natal no pudo transmitir ese mensaje plenamente.

         El evangelio dice que pudo hacer algunos milagros, no pudo hacer los que realmente necesitaba para demostrar a todos ellos lo que Dios Padre quiere con nosotros, salvarnos, liberarnos.   De todo esto hay una clave para lograr la salvación de Dios, san Pablo nos dice, nos basta la gracia de Dios, pero también nos basta la fe, confiar en Él, que es el único que nos salva, confiar en Jesús que ha venido para darnos vida y vida en abundancia, confiar es esa presencia divina de Dios en medio de nosotros, que siempre busca formas, motivos para salvarnos.  

      Que no olvidemos que lo único que Dios quiere es nuestra salvación y nosotros tenemos que creer en su amor, en su misericordia, en su bondad, para que podamos empaparnos, ser trasmisores de ese amor y podamos llegar todos juntos a la salvación de Dios.

 

Comentarios

  1. Muy cierto, se necesita Fé, Esperanza y Amor, mediante mí abandono. Dejarme guiar, en su voluntad y mí docilidad. Señor Jesús, en tí confío ❤️.

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